La remesa simple es la gestión de cobro del documento financiero a través del cual se ha instrumentado la deuda de la operación de compraventa o prestación de servicios.
En este caso, los documentos comerciales, que son los que dan lugar a la transmisión de la propiedad de la mercancía, son remitidos por el exportador al importador, fuera del circuito de pago.
Si entre exportador e importador han pactado liquidar el pago mediante letra, el exportador la confeccionará y procederá a gestionar el cobro a través de su entidad financiera.
Si la forma de liquidar el pago ha sido el pagaré o el cheque, el importador lo remitirá al exportador. En este caso, el exportador, al recibir el documento, lo remitirá a su entidad financiera para que efectúe la gestión de cobro en el caso del pagaré, o bien para que abone el cheque salvo buen fin o, en otro caso, también lo remita en gestión de cobro.
La creación de la remesa simple nos viene dada porque los documentos comerciales que dan la propiedad de las mercancías se han tratado entre exportador e importador al margen del proceso de liquidación del pago. En la generación de una remesa simple podemos distinguir las siguientes fases:
1.-El exportador entrega los documentos comerciales al importador, que entra en posesión de la mercancía.
2.-El importador entrega el documento financiero en donde se instrumenta el pago, letra, cheque o pagaré al exportador. En el caso de letra de cambio, ésta es normalmente generada por el exportador.
3.-El exportador entrega el documento financiero a su entidad para que gestione el cobro a través de la entidad financiera del importador.
4.-El importador procede al pago del documento presentado por la entidad cobradora si es a la vista o acepta el efecto si es a plazo, efectuando finalmente el pago a su vencimiento.
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